viernes, 28 de marzo de 2008

¿Vivir 1.000 años? Los científicos transhumanistas creen que es posible

Un artículo que, al grito de "Noticia Z!!! Noticia Z!!!" nos pasó cHagHi. Gracias!

El artículo es bastante extenso, así que lo recorté un poco.

En los últimos años surgió un nuevo paradigma sobre el futuro del hombre, que comenzó a tomar forma entre un grupo de científicos vinculados a áreas como neurología, sociología, computación y nanotecnología. Se llaman " transhumanistas " y argumentan que ya es hora de que los humanos se liberen de las "cadenas biológicas"; una nueva forma de pensar sobre la premisa de que la condición humana es esencialmente inalterable. La visión de la tecnología por parte del transhumanismo es interpretada como el desarrollo de nuevas herramientas que ayuden a superar las limitaciones biológicas y cambiar la condición humana, haciendo esta realidad posible para aquellos que lo deseen, convirtiéndose así en "post-humanos".

¿Ciencia ficción? ¿Locura? ¿Futurismo?. Según la Asociación Transhumanista Mundial: "El transhumanismo (como sugiere el término) es una especie de humanismo con 'algo más'. Los transhumanistas creen que ellos pueden mejorarse socialmente, físicamente y mentalmente haciendo uso de la razón, la ciencia y la tecnología. Además, el respeto por los derechos del individuo y una creencia en el poder del ingenio humano son elementos importantes. También repudian la creencia en la existencia de poderes sobrenaturales que nos guían. Estas cosas, en conjunto, representan el corazón de nuestra filosofía. El enfoque crítico y racional que apoyan los transhumanistas está al servicio del deseo de mejorar la humanidad y el género humano en todas sus facetas". Literalmente, buscan hacer "mejores humanos", lo cual permitiría vivir más.

La extension radical de vida, la criónica y el "mind uploading" son los temas transhumanistas más discutidos públicamente mientras sus pensadores desarrollan los fundamentos de todo un sistema filosófico. En marzo de este año, durante una conferencia titulada "La gente del mañana: el reto de las tecnologías para la extensión y el mejoramiento de la vida" que se realizó en el instituto James Martin de la Universidad de Oxford, Aubrey de Grey, la genetista de la Universidad de Cambridge descrita como "quizá la más optimista" de los científicos que quieren prolongar la vida humana, cree que muchas de las personas que actualmente son jóvenes, vivirán hasta los 120 años. También dijo en su exposición que es probable que una persona que esté viva en estos momentos pueda llegar a los 1.000 años de edad.

[...] De funcionar estas terapias, agrega de Grey , se evitará " que la edad nos vuelva frágiles, decrépitos y dependientes. Moriremos, claro. Moriremos si cruzamos la calle sin cuidado, o si nos muerde una serpiente, o por una variedad de gripe. Pero no moriremos de la misma manera en que lo hacemos hoy". Pero para esto también los transhumanistas tendrían una posible solución. Se trata del "mind uploading": hacer una "copia de seguridad", de la información contenida en la mente, para permitir volver a "cargar" la misma en un nuevo cerebro biológico o robótico. ¿De película, no?. Sin embargo, su aplicación práctica está siendo analizada y estudiada. Según Kurzweil, opciones de semejante radicalidad podrían estar disponibles en unas cuantas décadas, lo que significaría (siempre en potencial) que nuestros hijos podrían vivir eternamente. Pero, ¿y la generación actual?.

Hay alternativas pensadas (o imaginadas) para todos. Una opción disponible es el procedimiento conocido como "criogenia": congelar el cuerpo después de la muerte a la temperatura del nitrógeno liquido (de tal manera que todo el proceso de degradación biológica se detiene), con la esperanza que dentro de unas cuantas décadas la ciencia médica sea capaz de devolverlo a la vida, probablemente gracias a la existencia de n anotecnología ya madura . La empresa norteamericana Alcor, por ejemplo, ya tiene 67 personas criopreservadas y 710 que ya firmaron su contrato para cuando les llegue "el momento". Pero esto no es todo, también se habla del desarrollo fármacos que prometen reducir drásticamente la incidencia de emociones negativas en la vida o pueden modificar la personalidad y ayudar a superar la timidez, eliminar los celos, incrementar la creatividad y aumentar la capacidad emocional.

[...] Aunque la ficción ya se adelantó en estos temas, no hay que olvidarse que esto no es una película, que sería la primera vez que una especie crea las condiciones para su propia evolución y que por lo tanto necesita un debate ético muy serio para encontrar cuáles serían los límites de semejante avance y transformación.

Fuente: Clarín